El ginecólogo Diego Villagrán Bustillo, responsable del servicio de Ginecología del hospital del Servicio Andaluz de Salud de Jerez hasta 2003, año de su jubilación, falleció el pasado miércoles rodeado de toda su familia. El doctor Villagrán, viudo de María del Carmen Yáñez Juez, tenía cinco hijos: Santiago, Iñigo, Álvaro, María y Diego y había nacido el 22 de diciembre de 1932 en Jerez. Era médico especialista en Ginecología y Obstetricia y su carrera profesional estuvo siempre vinculada a la sanidad pública y en concreto al hospital de Jerez, donde ejerció desde el primer día que abrió las puertas el centro sanitario. También desarrolló su especialidad en la consulta que tuvo durante muchos años en la plaza Monti.Diego Villagrán era muy aficionado a la náutica y a la naturaleza, unas aficiones que compartía con sus hijos y sus cinco nietos, a los que dedicó su vida, ya que se trataba de una persona muy familiar. Aunque nacido en Jerez, desde hacía unos años había fijado su residencia en El Puerto, localidad en la que se produjo el fallecimiento.En el hospital de Jerez, donde llegó a ser hasta su jubilación el responsable del servicio de Ginecología, era una persona muy querida y se le recuerda como un magnífico profesional no sólo por los que fueron sus compañeros, sino también por colegas de su especialidad de otros centros sanitarios. Desde el hospital destacaron además su amplia experiencia y su ingente actividad quirúrgica en el servicio de Obstetricia. Diario de Jerez se suma con estas líneas a las numerosas muestras de condolencia recibidas por la familia.ALGUNOS de los que cumplimos los años en agosto, tenemos la sensación de que vinimos al mundo en una estación de paz, en unos días en los que una gran parte de los españoles disfruta del descanso. Agosto siempre ha sido el mes de las vacaciones por excelencia, cuando incluso centros oficiales echan el cierre, y es la treintena de días en la que la mayoría de los políticos se tiran a la bartola, como hacen también los profesores, estos después de un curso de arduo y loable trabajo. Es agosto tradicionalmente el mes preferido por los veraneantes, aunque no todos los que quisieran puedan hacerlo. Y al igual que a otras estaciones, los poetas han cantado sus características ambientales y paisajísticas. El maestro Manuel Machado, al cantar a su tierra andaluza, glosó así el verano: Frutales/ cargados./ Dorados/ dorados trigales…/ Cristales/ ahumados./ Quemados/ jarales…/ Umbría/ sequía,/ solano…/ Paleta/ completa:/ verano". Mas de los versos con el verano como tema, tenemos especial predilección por el soneto escrito por Leopoldo Panero. Se titula "Agosto en el cielo". Es en esencia un poema de amor. Leámoslo: "Flota agosto en el cielo, y bajo el techo/ transparente del tiempo, flota el llano./ Late tú en mi calor como el verano,/ que en ráfaga inmortal, mientras me echo/ sobre la tierra verde, como un lecho/ de frescura, me entibia: tan cercano/ que siento, al respirar, lo más lejano/ del cielo, en la raíz dulce del pecho./ ¡Tiniebla de inocencia apenas rota/ por el brillar de las estrellas! Late,/ de espaldas, cara al cielo, el pensamiento,/ tibio de luna azul el campo flota,/ y cual el cuerpo apretado en el combate,/ la oscura masa de la tierra siento". Y un clásico, Enrique de Mesa, tuvo la satisfacción de componer letrillas como las siguientes, bajo el título "Agosto": "Envuelto en la calina/ por la recia solana,/ a la aldea cercana,/ lento, un carro camina". "Y gigante de la gleba/ del llano amarillento,/ su majestad eleva/ un molino de viento".Realmente, son estampas de veranos de antaño los versos transcritos y que recordamos en este mes de agosto, llamado así por el emperador romano Octavio Augusto en honor de sí mismo. Apuntemos también que la flor de agosto es la amapola y que un tres de agosto de hace quinientos diecisiete años salieron del puerto de Palos de la Frontera, las carabelas mandadas por Cristóbal Colón, a la búsqueda de las Indias. Tampoco hay que olvidar hechos trágicos que a lo largo de la historia han tenido lugar en el transcurso de agosto, entre ellos la explosión de las primeras bombas atómicas. Y una muerte en accidente de tráfico que ocupó la primera plana de los periódicos del mundo entero, la de Lady Diana Spencer, el treinta y uno de agosto de mil novecientos noventa y siete. Anotemos, en otro sentido, que en agosto se celebran numerosas fiestas religiosas, entre ellas la de la Asunción de la Virgen, fiesta a la que se le acompaña un dicho popular: "Si llueve en la Virgen de Agosto, año de buen mosto". Por último y por si algún zocato no lo sabe, el trece de todo agosto es el Día del Zurdo. Felicidades anticipadas. El veterano y reconocido rociero Felipe Merino asumirá el cargo de teniente de hermano mayor de la hermandad del Rocío que estaba vacante tras el reciente fallecimiento de Ignacio Muñoz. La toma de posesión se ha fijado para el lunes día 17 de este mes en el transcurso de la semanal misa que celebra la hermandad en Santo Domingo. Merino acumula una amplia experiencia rociera habiendo llegado a ser hermano mayor. La página web de la hermandad precisa que este nombramiento ha sido una exigencia de la Delegación Diocesana de Hermandades y Cofradías. El propio Felipe Morenés reflexiona en la nota informativa que "es razonable. Haciendo de tripas corazón, como se dice comúnmente, es necesario que este importante cargo de junta esté ocupado por razones obvias", aclarando que "no ha sido fácil escoger a la persona adecuada para este cargo. Además a mitad de la legislatura. Tenía que ser una persona con experiencia y tiempo disponible. Esos dos requisitos se daban en la persona de Felipe Merino. Finalmente, tenía que haber un amplio componente de generosidad y cariño hacia la Santísima Virgen del Rocío y la Hermandad. Y Felipe Merino los tiene". El hermano mayor subraya su "agradecimiento a mi tocayo por acceder a mi oferta, después de haber meditado responsablemente. Le pido a nuestra madre del Rocío que lo proteja y le ilumine para realizar con acierto su gestión, de lo cual no me cabe la menor duda".
viernes, 7 de agosto de 2009
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